Obesidad, ansiedad y depresión: el peso del estigma en la salud mental

La obesidad no solo impacta la salud física; también tiene un efecto profundo en la salud mental. Las personas con obesidad enfrentan con frecuencia estigmatización social, que puede derivar en ansiedad, depresión y baja autoestima.

Expertos destacan la importancia de reconocer la obesidad como una enfermedad crónica, lo que permite ofrecer un enfoque integral que combine apoyo emocional, psicológico y nutricional. La empatía y la comprensión son fundamentales para que quienes viven con obesidad puedan mejorar su bienestar general y su calidad de vida.
El estigma social no solo limita la interacción social, sino que también puede afectar la motivación para buscar ayuda médica o adoptar hábitos saludables. Por ello, crear ambientes de apoyo y aceptación es clave para fomentar cambios positivos en la salud física y emocional de estas personas.

Consejos prácticos:
- Evitar comentarios negativos sobre el peso o apariencia.
- Fomentar la comunicación abierta y el apoyo emocional.
- Promover hábitos saludables sin juzgar ni culpar.
- Buscar ayuda profesional si es necesario (psicólogo, nutricionista, médico).
La conciencia social y la educación sobre el impacto del estigma pueden marcar la diferencia en la vida de quienes luchan con la obesidad, ayudándolos a cuidar su cuerpo y su mente de manera integral.